«La vida consagrada no es una pérdida, sino una entrega que llena el alma de sentido y alegría». Entrevista al nuevo diacono P. Enmanuel Toro LC

El P. Enmanuel Toro LC. se ordeno diacono el pasado 20 de septiembre de 2025 en Mérida, Venezuela. Días antes de su ordenación diaconal, conversamos con él para conocer más sobre su vocación y su vida. Te invitamos a descubrir su historia en la siguiente entrevista.

El P. Enmanuel LC nació en Valera, Trujillo, el 6 de septiembre de 1996. Su familia fue su primera escuela de fe. Su papá, diácono permanente, marcó profundamente su vocación. A los once años ingresó al Centro Vocacional de los Legionarios de Cristo en Barquisimeto y en 2015 emitió su primera profesión religiosa. Estudió humanidades en Cheshire, Connecticut, realizó prácticas apostólicas en la promoción vocacional en New England (Estados Unidos) y estudió filosofía y teología en Roma.

¿Qué lo llevó a pensar en ser sacerdote?

Desde pequeño mi familia cultivó y protegió mi fe. Tenía un gusto por la liturgia y el sacerdocio que al inicio no comprendía, pero fue con la invitación de un sacerdote a descubrir lo que Dios me pedía, en una experiencia religiosa, que vi más claramente que este es mi camino de vida.

¿Cómo fue su “sí” al Señor?

Cuando recibí la invitación para vivir la experiencia con los Legionarios de Cristo tenía apenas once años. A pesar de mi corta edad, aún recuerdo las palabras de mis padres. Ellos, conscientes de que esta decisión significaría separarme de ellos, me dijeron con amor y libertad: «Tú decides qué quieres hacer»..

Así como María sintió cierta turbación al escuchar el anuncio del ángel, yo también experimenté incertidumbre: no sabía qué sucedería si decía «sí». Sin embargo, al mirar atrás y recordar lo que he vivido, no puedo más que agradecer a Dios por haberme dado la gracia de responder afirmativamente y por todas las maravillas que ha hecho en mi vida desde entonces.

El P. Enmanuel Toro LC, en compañía de su familia.

¿Qué papel juega la familia del Regnum Christi en su experiencia vocacional?

La familia del Regnum Christi ha tenido un papel clave en mi experiencia vocacional. Desde el inicio, me ofreció un ambiente en el que pude descubrir y madurar mi llamada, rodeado de personas que viven con alegría y entrega su fe. Una vez que entré a la Legión y me separé físicamente de mi familia, encontré un nuevo lugar al que puedo llamar también FAMILIA.

A través del acompañamiento espiritual, formación integral, encuentros y testimonios de vida coherente, el Regnum Christi me ha ayudado en mi discernimiento a buscar lo que Dios quiere de mí. Además, la cercanía y la oración constante me han sostenido en los momentos de duda o dificultad, haciéndome sentir parte de una verdadera familia espiritual que camina conmigo en este proceso.

¿Qué ha sido lo que más le ha ayudado en su vocación?

La mayoría de las cosas que he vivido han sido motivos de crecimiento en mi vocación, pero lo que más me ha ayudado en mi formación inicial y en mi vocación es la presencia de Cristo Eucaristía en mi vida diaria. También me ha ayudado el tener la oportunidad de ser escuchado, acompañado, viviendo una vida común con otros hermanos que buscan lo que Dios quiere de ellos.

¿Qué le diría a un joven que está discerniendo si Dios le llama a la vida consagrada?

Le diría que no tenga miedo, que abra su corazón a Dios y se deje sorprender por Él. Que no se centre solo en lo que tendría que dejar, sino en todo lo que podría recibir. La vida consagrada no es una pérdida, sino una entrega que llena el alma de sentido y alegría. Le animaría a buscar momentos de oración, a dejarse acompañar espiritualmente y a confiar en que, si Dios lo llama, también le dará la gracia para responder con generosidad y fidelidad.

¿Cuál es su pasaje favorito del evangelio?

De tantos pasajes que me gustan, al que puedo llamar mi pasaje favorito del Evangelio es Marcos 10,45: «Porque el Hijo del Hombre no ha venido para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por muchos». Este versículo expresa profundamente el sentido del sacerdocio según el testimonio de Jesús y de toda vocación cristiana: una vida entregada para amar sirviendo, como lo hizo Jesús. Es un llamado constante a vivir con humildad, generosidad y don de sí.

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